Breves crónicas en tiempos de COVID-19
Pedagogía social
Dr. Fernando Guerrero Bermúdez
Hastiado de recibir tantas noticias de corrupción, pensé que
era necesario saber más sobre el significado del término, también su
connotación tanto, en la dimensión material como en la mental-conductual,
porque es en ésta donde logra distorsionar la conducta personal y psicosocial;
estudios últimos han demostrado, que la conducta corrupta perturba el
funcionamiento cerebro-mental.
Es conveniente revisar algunos conceptos
que esclarezcan qué es la corrupción, tanto en la dimensión material como en la
dimensión mental-conductual.
En la dimensión material, se dice que corrupción es el deterioro o
descomposición de algo, por ejemplo, alterarse, podrirse.
En la dimensión mental-conductual, la influencia interferente de la
corrupción, distorsiona la mentalidad ética social fraterna de la persona, así
como la trama psicosocial; tenemos como ejemplo el caso de soborno, con dádivas
o prebendas injustificadas.
Además, en la dimensión mental-conductual, la corrupción va en contra de
la calidad de vida de las otras personas, ya que se apropia injustamente de los
recursos de todos, en beneficio personal o de un grupo pequeño, sin tomar en
cuenta el eterno principio moral “no hagas a otro lo que no quieres que te
hagan a ti”.
Cuando se refiere a las organizaciones, especialmente
las públicas, se dice que la corrupción es el aprovechamiento económico o de
otra índole; es el caso del tráfico de influencias por parte de los
funcionarios, que se valen de su condición.
En la actividad política se entiende como corrupción, al mal uso del
poder público para obtener una ventaja ilegítima y anti ética, que ha llegado a
los límites de aprovecharse de los recursos destinados a saciar el hambre de
las personas que lo necesitan, así como también la apropiación de dineros que
sirven para la adquisición de insumos sanitarios; es imperdonable que existan
personas que se apoderan de los recursos sagrados de la jubilación, que son el producto
de un esfuerzo digno de por vida, en procura de una buena calidad de vida en la
vejez.
A la conducta humana subyace la función cognitiva mental
consciente, que es la que determina el accionar de la persona. La información
de la corrupción distorsiona las imágenes de la función cognitiva consciente.
Por lo controvertido del tema, se pueden crear posiciones
subjetivas con verdades circunstanciales relativas, alejadas de la realidad; por
lo que es conveniente tomar la Teoría de Valores de la Disciplina
Holosergética, que se enmarca en la real dimensión humana, que está acorde con
los conocimientos actuales. Esta teoría de valores (axiología) manifiesta que
“Todo lo que va en beneficio de la vida, es bueno y, todo lo que va en contra
de ésta, es malo”.
La corrupción es mala porque distrae recursos que deberían
ser utilizados para el bienestar vital de todos los miembros de la sociedad y
afecta al desarrollo con salud.
Desde el punto de vista mental-conductual, la corrupción es
mala porque distorsiona el área ética moral de la mente de las personas que lo
practican, y adquieren una conducta perturbada, en contra de su vida y la de
los demás.
La Disciplina Holosergética propone la solución a la
corrupción y a otras distorsiones sociales y vitales, a través de la estrategia
de armonización vital holística, que se basa en aprovechar energías armónicas vivenciales
sónicas, lumínicas y mentales, para que las personas se desarrollen acorde con
las leyes naturales de la existencia y la vida, así como también, se desenvuelvan
con transparencia y consciencia social.
La orientación vivencialista holosergética resuena con el
criterio que dice que “Si el humano desea seguir existiendo debe cambiar su
manera de pensar”, por lo que proponemos hacer una revolución mental con la
divisa “primero la vida”, que agrupe a todos los seres humanos conscientes en
defenderla.
Hoy compartimos algunas reflexiones orientadoras, que nos
ayuden a cambiar la manera de pensar:
1.
“Lo más importante que poseemos los seres
humanos en la vida, es la vida misma”. (FRGBz)
2.
Cualquier criterio o actividad que destruya o
vaya en contra del desarrollo de la vida, debemos eliminarlo.
3.
Para vivir, pensar y poder manifestar libremente
los criterios, no es necesario permiso, autorización ni decreto, ya que son
circunstancias inmanentes a la condición humana.
4.
El patrimonio natural más valioso del planeta
tierra es el ser humano, pues sin él no existiría consciencia, cultura ni
civilización.
5.
El ser humano es una entidad que está
íntimamente relacionada con la naturaleza; debemos aprender a valorar cómo ésta
incide en nuestro desarrollo vital y social.
6.
Estamos viviendo tiempos de riesgos apremiantes,
que atacan a la vida y a la conducta armónica, debido a la pandemia del
COVID-19 y por el ataque de la corrupción; es así que, a más de la pandemia
pavorosa viral, soportamos el ataque de la corrupción esquizofrénica social
reinante.
7.
Para dar una orientación valedera, coherente y
armónica a la conducta demencial de la sociedad contemporánea, es indispensable
promover una revolución mental que ponga como divisa principal “Primero la
Vida” con verticalidad, honestidad y transparencia.
8.
Para adquirir una cultura preventiva, que proteja
la vida y su desarrollo armónico, tanto biológico como social y mental, se ha creado
el Programa de Pedagogía Social de solidaridad oportuna, para desarrollar una
cultura preventiva en defensa de la vida y la salud, que permita un desenvolvimiento
vital social transparente, honesto y libre.
Dr. (Médico) Fernando Guerrero Bermúdez.
Presidente del
CIDEHUSH
Creador de la Disciplina Holosergética.
