martes, 14 de febrero de 2023

 1ª Entrega de la Guía conceptual práctica de armonización vital

"Si quieres encontrar los SECRETOS DEL UNIVERSO, piensa en términos de ENERGIA, FRECUENCIA y VIBRACIÓN" (Nikola Tesla)

TODO VIBRA EN EL UNIVERSO

Por Dr. Fernando Guerrero Bermúdez

Con el criterio que todo vibra en el universo, podemos afirmar que todo lo que existe tiene una vibración de frecuencia específica constituida por una onda esencial que, para relacionarse con otras ondas o entidades energéticas, posee ondas micro armónicas. En el caso de los seres vivos, los micro armónicos de la onda esencial sufren una variación dinámica para que el ser vivo se adapte al medio, por lo que debemos considerar que esta adaptación energética dinámica, lo realiza de dos maneras: una respuesta adaptativa vital genética esencial, que es la que permite el desarrollo armónico de la función vital, cumpliendo leyes de la naturaleza, sin la cual no existiría la entidad viviente. En el caso del ser humano, además existe una respuesta complementaria condicionada a lo sociocultural en la que juega un rol importante, el epigenoma.

Epigenoma es un término que se deriva de la palabra griega epi, que significa literalmente "por encima" del genoma. El epigenoma se compone de compuestos químicos que modifican, o marcan, el genoma de manera que le dice qué hacer, dónde hacerlo y cuándo hacerlo. Células diferentes tienen diferentes marcas epigenéticas. Estas marcas epigenéticas, que no forman parte del propio ADN, pueden ser transmitidas de una célula a otra durante la división celular, y de una generación a la otra.

Laura Elnitski, Ph.D., explica que “el epigenoma es la colección de todas las marcas epigenéticas en el ADN de una sola célula. Las marcas epigenómicas son diferentes en distintos tipos de células. Así, una célula de la sangre puede tener diferentes marcas o modificaciones con respecto a una célula del hígado. Las modificaciones epigenómicas, o sea, la colección completa de todas las marcas epigenéticas en mi ADN de las células de mi sangre, debe ser más similar a las marcas en el ADN de las células de tu sangre, que a la colección de todas las marcas en mi ADN de las células del hígado. Así que esta es una forma de definir un tipo particular de célula. Ahora debido a las diferencias individuales de mi epigenoma se diferencia de tu epigenoma, incluso en el mismo tejido. Son esas diferencias las que nos hacen a todas las personas individuales, y vamos a ver cambios aún mayores en un estado de enfermedad. Así que la comparación de una célula normal y de todos sus marcas epigenéticas, se diferencian de las marcas epigenéticas del mismo tipo de células cuando se presenta una enfermedad. Y podemos utilizar estas diferencias para averiguar los mecanismos de la enfermedad”.