EXPUESTA EN LAS JORNADAS CULTURALES POR LOS 250 ANIVERSARIO DE HUMBOLDT. EN LA SOCIEDAD BOLIVARIANA DEL ECUADOR.
Expositor principal:
Dr. Fernando Guerrero Bermúdez, presidente del CIDEHUSH
Mentalgrafía Holosergética de Humboldt
Coexpositores:
Dr. César Alarcón Costta, vicepresidente de la Academia de Historia del Ecuador
Humboldt en el Ecuador
Lic. Carlos Guerrero, licenciado en Restauración de Bienes Culturales
Humboldt, un Paradigma Patrimonial
Msc. Edgar Coral
Alexander Von Humboldt, Proyección Social
Ing. Tannhausser Arévalo
Poeta Manuel Federico Ponce, presidente (e) De la Sociedad Ecuatoriana de Escritores
Poema de Altura
Poeta Nemo Domínguez, vicepresindente del Centro de Estudios Poéticos Internacionales
Alexander von Humboldt 1802
Mentalgrafía Holosergética de Humboldt
Coexpositores:
Dr. César Alarcón Costta, vicepresidente de la Academia de Historia del Ecuador
Humboldt en el Ecuador
Lic. Carlos Guerrero, licenciado en Restauración de Bienes Culturales
Humboldt, un Paradigma Patrimonial
Msc. Edgar Coral
Alexander Von Humboldt, Proyección Social
Ing. Tannhausser Arévalo
Apreciación Vulcanológica y sismológica de Alexander von Humboldt en sus viajes
Poema de Altura
Poeta Nemo Domínguez, vicepresindente del Centro de Estudios Poéticos Internacionales
Alexander von Humboldt 1802
MENTALGRAFÍA HOLOSERGÉTICCA DE HUMBOLDT
Dr. Fernando Guerrero Bermúdez
Presidente del CIDEHUSH
Lo
más importante que poseemos los seres humanos en la vida, es la vida misma,
pero, debemos tomar muy en cuenta el agregado especial que nos distingue, de
entender y razonar, facultad que subyace a la cultura y la civilización.
Con
estas reflexiones, la Holosergética considera que la mayor herencia que puede
dejar una persona, es la herencia mental, sus ideas y conceptos que han
coadyuvado al desarrollo social; por eso, estructura la Mentalgrafía.
La
Mentalgrafía es la expresión literaria vivencialista que, bajo parámetros
reflexivos, analiza y comparte cómo las ideas de abstracción subjetiva
personal, se convirtieron en conceptuación trascendente colectiva, que
influenció en el desarrollo social. Es una
herencia mental orientadora.
La Mentalgrafía da consciencia a lo que fue o es, del hecho
real; transforma la vibración conceptual subjetiva, en vibración cognitiva
universal.
La
Mentalgrafía de von Humboldt se desarrolla bajo la óptica de la doctrina
Holosergética, que es filosofía, ciencia y arte del vivir armónico que, como filosofía, es Posibilidalista; sostiene que lo que
existe ontológicamente, es la Posibilidad de Información Decoherente Holística
Universal.
Como ciencia, estructura sus conocimientos teniendo presente
que la ciencia es el método de reproducir un fenómeno, valiéndose de las leyes
de la realidad.
Al arte le concibe como la expresión de la creación vital
holística, armónica cognitiva coherente, de las áreas afectiva,
razonativa-intuitiva y psicomotriz del ser humano, que es compartida en
diversos medios de expresión y apreciación.
Si pudimos expresar los criterios anteriores, es porque
tenemos la facultad psíquica humana de entender que subyace a la cultura y
civilización; así podemos decir que entender es tener una idea clara de una
cosa o circunstancia y que idea es la imagen mental energética abstracta,
producto de la captación de la realidad o de una ficción y es la que nos guía
en el comportamiento social.
Para tener pensamientos concordantes con la realidad, es
necesario saber que realidad es la presencia efectiva de algo, que puede dar o
recibir información e influencia por resonancia y que verdad es la captación
subjetiva personal de la realidad.
Debemos comprender que, para que una actividad humana sea
efectiva, debe resonar con la realidad armónica y coherente.
Podemos apreciar que existen dos actividades humanas, que
transitan por la realidad ontológica de la naturaleza, que son la ciencia y el
arte.
La ciencia, según sus posibilidades de comprobación
sectorizada, va evolutivamente resonando con esa realidad trascendente.
La creación artística resuena con la realidad ontológica natural,
a través de resonar la vida holísticamente, con sus áreas afectiva,
razonativa-intuitiva y psicomotriz, por eso, el mensaje de la obra artística es
perenne.
Para apreciar el proceso orientador de la Disciplina
Holosergética en el desarrollo de la Mentalgrafía, es conveniente tomar varios
criterios valederos actuales, con los cuales se correlacionan; así, podemos
decir que mente es un estado funcional creado por el cerebro; “los estados
mentales conscientes pertenecen a una clase de estados funcionales del cerebro,
en los que se generan imágenes cognitivas sensomotoras, incluyendo la
autoconciencia”, Rodolfo Llinás, 2003.
Según la óptica de la Disciplina Holosergética, el
pensamiento es campo de resonancia de información de función vital. Es una
imagen mental sensoperceptiva cognitiva.
Debemos reflexionar que la naturaleza es real; quien profundiza
en conocerla, transita por los senderos de sus leyes; es así, como Humboldt, al
escrudiñar la naturaleza y clasificar la geografía y el mundo físico, así como,
clasificar y dar nombres a las especies vitales, transitaba por la realidad
natural y humana, prodigando conocimientos efectivos y valederos para el
desarrollo vital y social del ser humano.
La intención de Humboldt, antes de sus viajes, la sintetiza
cuando expresa:
“Voy
a recoger plantas y fósiles, y realizar observaciones astronómicas con el mejor
de los instrumentos. Sin embargo, este no es el propósito principal de mi
viaje. Trataré de averiguar cómo las fuerzas de la naturaleza actúan unas sobre
otras, y de qué manera el entorno geográfico ejerce su influencia sobre los
animales y las plantas. En resumen, debo aprender acerca de la armonía en la
naturaleza “.
Humboldt tenía la concepción que las ideas y
conocimientos debían compartirse, intercambiarlos y ponerlos a disposición de
todos, concepción que le llevó a decir “me ha asaltado la locura de representar
en una sola obra, todo el mundo material”. Se propuso escribir un libro que
coincide con la idea de las filosofías orientales, que dicen: “que lo que
existe entre el cielo y la tierra es energía y ley”, es así como pensó en la
unicidad de los conocimientos de la existencia y la vida, desde los confines
del universo hasta la ínfima estructura vital; correlacionando la ciencia y la
poesía dijo, “este libro sobre la naturaleza, debería producir una impresión
como la de la naturaleza en sí”, que lo materializó en un buen porcentaje, en
su obra “Cosmos”.
“Humboldt
concibió la tierra como un gran organismo vivo, en el que todo estaba
relacionado y engendró una nueva visión de la naturaleza, que hasta hoy influye
en nuestra manera de comprender el mundo natural”. Andrea Wulf, 2016.
Tenía
la pasión por medir y analizar la naturaleza; pensaba que nuestra reacción ante
el mundo, tenía que depender en parte, de las sensaciones y emociones. Quería
despertar el amor a la naturaleza y que la naturaleza se debía experimentar a
través de los sentimientos.
Humboldt,
al catalogar las distintas especies, no lo veía como una estricta clasificación
sino como un tipo en función de la situación y el clima. Para él, la naturaleza
era una fuerza global con zonas climáticas correspondientes en todos los
continentes. Es un concepto de avanzada para su época y que todavía inspira
nuestra interpretación de los ecosistemas.
En
un adelanto de conocimientos, inventó las isotermas que son las líneas de
temperatura y presión que vemos en los mapas del tiempo actuales.
Descubrió
el ecuador magnético; tuvo la idea de que las zonas de vegetación y climáticas
recorren el mundo, pero lo más importante es que revolucionó la manera de ver
el mundo natural; encontraba conexiones en todas partes; no concebía ningún
organismo, por más diminuto que sea, por sí solo, y llega a decir “en esta gran
cadena de causas y efectos, no puede estudiarse un hecho aisladamente”; con
esta perspectiva, da el concepto de naturaleza que conocemos hoy.
Después
de ver las devastadoras consecuencias medioambientales de las plantaciones
coloniales, en el Lago Valencia, en Venezuela, en 1800, Humboldt fue el primer
científico que habló del nocivo cambio climático provocado por el ser humano.
La deforestación había dejado la tierra estéril; el nivel del agua había
disminuido y con la desaparición de la maleza, las aguas torrenciales habían
arrastrado el suelo de las laderas de las montañas del alrededor.
Humboldt
fue el primero en explicar la capacidad del bosque para enriquecer la atmósfera
con su humedad y su efecto refrescante, además de su importancia para retener
las aguas y proteger el suelo contra la erosión. Advirtió que los seres
humanos, estaban interfiriendo en el clima, y eso podía tener consecuencias
impredecibles para las futuras generaciones. Hoy somos testigos con el ejemplo
aterrador, de lo que sucede en la Amazonía, la destrucción de la naturaleza al
talar, quemar y habilitar espacio para actividades agropecuarias o extractivas.
Conocemos
que la Amazonía es el hábitat del 1/3 de las especies que habitan la tierra y
alberga una quinta parte de los bosques del mundo; es responsable de captar carbono,
proveer oxígeno y es un regulador de la temperatura a escala global. Según
Gonzalo Rivas, investigador de la Universidad San Francisco de Quito, PHD en
manejo de vida silvestre y conservación, considera “que la Amazonía debería ser
intocable”.
Estos
conocimientos nos traen a la memoria la reflexión que dice que el ser humano
debe cambiar su manera de pensar para seguir existiendo, por lo que me permito
compartir con ustedes, las siguientes ideas:
MENSAJES
HOLOSERGÉTICOS DE CONSCIENCIA VIVENCIALISTA
(Fernando Guerrero Bermúdez)
Sí
Humano, tu mente rige tu conducta.
¿Qué
pócima existencial retorcida envenenó tu consciencia?
Para
que, con tu paupérrima condición de entender la realidad,
Plagada
de intereses vanos, personales, materiales, económicos,
llena
de falsedad, engaño y corrupción,
te
arrogues la posibilidad de crear un hábitat.
Lo
que vas logrando es producir un contravidat
de
ambiente desolador, cargado y potenciado de errores,
artificial
e intrascendente,
en
contradicción flagrante con el hábitat natural,
que
si es real, inconmensurable y bello;
Hoy
vemos cómo el planeta
Se
calcina en el fuego del averno,
Provocado
por la codicia desmesurada de ambición y corrupción.
Hoy,
más que nunca,
invocamos
los sabios pensamientos de Humboldt,
que
expresó el deber de respetar el equilibrio de la vida humana con la naturaleza,
y nos advirtió, con magistral profecía, que el ser humano es el primer
depredador de la naturaleza.
Es
petición urgente,
Unir
consciencias diáfanas, honestas y verticales,
Para
defender la vida en general y la humana, en particular.
Las
ideas de Humboldt tuvieron trascendencia en varios campos del desarrollo vital
y social; así lo apreciamos en sus ideas sobre la esclavitud como la que dice “No hay razas inferiores; todas ellas están destinadas
a alcanzar la libertad “. En esta misma
línea de pensamiento, a pesar de que admiraba a Estados Unidos por su
concepto de libertad e igualdad, nunca dejó de criticarlo por no abolir la
esclavitud.
Es
precisamente en Guayaquil, donde Humboldt lanzó la idea de que la independencia
era la mejor vía hacia el futuro. (Segundo Moreno Yánez, 2001).
Las
ideas de Humboldt, influenciaron en pensadores, artistas y científicos
destacados de su tiempo y su influencia todavía tiene vigencia. Podemos
apreciarlo en las expresiones con respecto a Humboldt.
Thomas
Jefferson lo llamó “una de las mayores joyas de la época”.
Charles
Darwin escribió que “nada estimuló tanto mi entusiasmo como leer la personal
narrativa de Humboldt” y dijo que no se habría embarcado en el Beagle, ni
concebido el origen de las especies, sin Humboldt.
William
Wordsworth y Samuel Taylor Coleridge incorporaron el concepto de naturaleza de
Humboldt a sus poemas.
El
gran destacado autor de Estados Unidos de textos sobre la naturaleza, Henry
David Thoreau halló en los libros de Humboldt, una respuesta a sus dilemas de
cómo ser poeta y naturista.
El
gran Libertador, Simón Bolívar, llamó a Humboldt “el descubridor del nuevo
mundo”.
Johann
Wolfgang von Goethe, declaró que, al pasar unos días en compañía de Humboldt,
era como “haber vivido varios años”.
Humboldt
da la concepción de la naturaleza. Esta idea es tan obvia que nosotros nos
hemos olvidado del hombre que la creó, pero existe una conexión directa, a
través de su pensamiento y todas las personas a las que inspiró el concepto de
naturaleza de Humboldt.
Las
ideas de Humboldt son inspiradoras para incursionar en la ciencia y el arte,
transitando por la realidad de la naturaleza; es así como comparto con ustedes
mis vivencias en relación a la naturaleza.
Cuando
realizaba la medicina rural, en una de esas tardes, al regresar de atender a un
paciente en su domicilio, observé un riachuelo y le dije: -nadie se ha
preocupado de ti, de tus formas, de tus sonidos y de tu mensaje esencial de
existencia natural. Se me vino a la memoria la eterna pregunta que dice: ¿Si en
un bosque no existe quién escuche la caída de un árbol, existe o no existe el
sonido? Ya se ha dicho que no existe
sonido en estas condiciones, pues el sonido existe en el mundo perceptivo
simbólico mental cognitivo, de abstracción, de alguien que lo escuche. Fue como
le dije al riachuelo, mi percepción de abstracción simbólica te dará una
atención y escribí:
ENTORNO NATURAL (RIACHUELO)
(Fernando Guerrero Bermúdez)
Filamento de agua sin contorno;
compañero esmerado de la soledad.
Tienes musicalidad de llanto
y atractiva figura de la forma cambiante,
me recuerdas que la vida florece
pero la asfixiante civilización
te olvidó hace rato,
prefiero ser gota sobre el pasto
que lluvia sobre el pavimento.
En uno de los recorridos por los senderos de mi
patria, observé que compañías madereras, en forma obsesiva por ganar dinero,
con el criterio errado de desarrollo fundamentado en lo económico, destruían
los bosques naturales; así, mi abstracción simbólica personal cognitiva, escuchó
el mensaje que daba la naturaleza al hombre, y escribí:
LA NATURALEZA AL HOMBRE
(Fernando Guerrero Bermúdez)
Hoy humano cortaste mis pulmones
con esa máquina producto de tu invento.
¡Qué ruido hacías!
Taladraste el eco,
dejaste mi piel seca,
inerme al agua y al viento.
Surcos sin vida están en mi faz,
mi profunda herida es ácida como tu consciencia.
Olvida el orgullo de cemento, hierro y smog,
recuerda que tú me perteneces, no yo a ti,
tu castigo será mi muerte,
te pido juntemos equilibrio y armonía, para dar vida.
Con la influencia de los conceptos del viaje de
Humboldt al Chimborazo, escribí expresiones Holosergéticas al Chimborazo.
EXPRESIONES
HOLOSERGÉTICAS AL CHIMBORAZO
(Fernando Guerrero Bermúdez)
Oh!
Coloso de esencial existencia,
eres
singularidad de espacio-tiempo;
Dialogas
con el Todo, en perennidad suprema;
al
conocerte, el infinito transforma nuestras vidas,
para,
en equilibrio existencial,
saborear
el elíxir de creación divina,
y
luego, en convicción suprema, defender la vida.
No podemos soslayar que las ideas de Humboldt tienen
una perennidad y vigencia en los campos de la concepción de la vida, de la vida
humana en relación con el medio ambiente, criterios orientadores en el campo
político de libertad y como colofón supremo, da el mensaje de que la ciencia
debe correlacionarse con el arte para lograr un desarrollo con salud en el ser
humano.
La gran obra de Humboldt tuvo la bondad de
correlacionar, magistralmente, la ciencia y el arte, dándoles una dimensión
superior; influenciado por estos, comparto con ustedes, pensamientos
Vivencialistas Holosergéticos, que los expreso en mi creación “Como quiero
vivir”:
COMO
QUIERO VIVIR
(Fernando Guerrero Bermúdez)
No
me pidas vivir para la ciencia,
Que
es lágrima de realidad,
Ahogada
en la vida.
No
me pidas que viva para la filosofía,
Es
búsqueda que no encuentra la nada.
Pídeme
que viva la música,
Es
vibración armónica de la existencia.
Pídeme
que viva la literatura,
Es
vivir los conceptos congelados
en
la palabra.
Te
ruego, pídeme que viva el arte y la poesía,
que
son afecto y pensamiento
que
resuenan con la esencia de la vida misma.
Con ideas concordantes con estos criterios ya hemos
formado el Círculo de Desarrollo Humano con Salud Holosergético (CIDEHUSH).
Gracias.
Dr. Fernando Guerrero Bermúdez.
Con la concepción de Humboldt que los conocimientos debían
compartirse, intercambiarlos y ponerlos a disposición de todos, intervendrán
otros expositores, para lograr una obra y un mensaje en común.
Intervención del Dr. César Alarcón Costta, Historiador
HUMBOLDT EN EL ECUADOR
El
científico, naturalista, geógrafo, explorador barón Alexander von Humboldt nació
en Berlín el 14 de septiembre de 1769, hace 250 años. Su visión universal y su
extraordinaria mentalidad investigativa le impulsaron a organizar su viaje al
continente descubierto por Cristóbal Colón tres siglos antes. El 5 de junio de
1799, junto con su amigo el médico francés Aimé Bonpland y con a debida
autorización del Rey Carlos IV de España, desde La Coruña emprendieron su
histórico viaje hacia el continente americano. Llegaron a Venezuela y
exploraron la cuenca del Orinoco; luego, por Cartagena ingresaron a la actual
Colombia y llegaron a Bogotá, donde hicieron amistad con el naturalista José
Celestino Mutis y Francisco José de Caldas.
Desde
Bogotá viajaron a Quito, ciudad a la que llegaron en enero de 1802. Fueron
recibidos y se alojaron en la casa del Marqués de Selva Alegre Juan Pío
Montúfar. En esta ciudad permanecieron cinco meses, conocieron a su gente, sus
paisajes, su vegetación y ascendieron al Pichincha que entonces tenía nieve
permanente.
Humboldt
llegó a Quito en una época muy especial, la élite intelectual que, había sido
ilustrada e inspirada por el prócer de la Independencia Dr. Eugenio de Santa
Cruz y Espejo quien murió siete años antes, el 27 de diciembre de 1795, se
encontraba en plena forja de su conciencia, espíritu patriótico y liderazgo para
constituirse, siete años después, el 10 de agosto de 1809 en los protagonistas
del Primer Grito de Independencia.
La
presencia y las sabias enseñanzas de Humboldt, así como su amistad con la élite
quiteña, contribuyó a vigorizar su convicción de lucha por la libertad, la
igualdad y la fraternidad, proclamadas en 1789 por la Revolución Francesa, así
como por la admiración, respeto y amor a la naturaleza. Humboldt con su
minucioso estudio de la vegetación, de las especies animales, de los minerales
metálicos y no metálicos, del clima, de las aguas, de las montañas y valles,
despertó el interés de la colectividad para valorar en su justa medida a la
naturaleza en su infinita variedad de manifestaciones.
Quito
era entonces una ciudad de unos 37.000 habitantes, tenía varias quebradas y
puentes, algunas de sus edificaciones fueron construidas sobre arcos y eran
frecuentes los temblores que se producían como réplicas del terremoto
registrado cinco años antes, el 7 de febrero de 1797, que destruyó la antigua
ciudad de Riobamba y causó graves destrozos en las ciudades vecinas de Pelileo,
Ambato y Latacunga, a las que los exploradores, en el curso de su viaje,
visitaron y se impactaron con la magnitud de los daños generados y de los miles
de vidas humanas perdidas.
Humboldt
hizo especial amistad con la familia Montúfar, tanto con el marqués Juan Pío,
como con el joven hijo Carlos (1780-1816), a quien Humboldt le incorporó al
grupo de expedicionarios, cuyo diario nos ilustra sobre el sobre el
extraordinario recorrido por el Ecuador.
Luego
de permanecer en Quito cinco meses, en la mañana del 9 de junio Humboldt,
Bonpland y Montúfar partieron con dirección al sur. Pasaron por Mulaló,
Latacunga, Ambato y Pelileo. El 14 de junio llegaron a la nueva Riobamba que
recién se empezaba a edificar en la llanura de Tapi. El día 16 estuvieron en la
vieja y destruida Riobamba, actual Cajabamba y Cicalpa, el 18 ascendieron al
Tungurahua, pero debido a lo escarpado de la pendiente no llegaron a las
nieves.
El
21 de junio desde Riobamba y utilizando sus aparatos de medición estableció que
el Chimborazo tenía una altura de 3309 toesas, antigua media francesa
equivalente a 1,94 metros, mientras que el Tungurahua alcanzaba a 2620 toesas.
Para ese entonces el Chimborazo era considerado la montaña más alta del mundo,
lo que se confirma en la actualidad si se mide desde el centro de la Tierra.
El
22 de junio de 1804 los tres exploradores: Humboldt, Bonpland y Montúfar
viajaron de Riobamba a Calpi y de allí se dirigieron al Chimborazo, la primera
parte lo hicieron a caballo y luego ascendieron paso a paso entre la nieve, su
proeza fue extraordinaria. Habiendo avanzado un largo trecho Humboldt encontró
piedras quemadas que ponían en evidencia que el Chimborazo era un volcán.
Calcularon haber alcanzado una altura de 3036 toesas, pero debido a una
profunda grieta que impidió el paso, no pudieron coronar el nevado y debieron
emprender el retorno a Calpi y luego a Riobamba.
Como
recuerdo fehaciente e inolvidable de este célebre ascenso, en el sitio
denominado Cruz del Arenal, donde confluyen las rutas a Guaranda, Ambato y
Riobamba, en la actualidad, a 4.200 m.s.n.m., se encuentra un egregio monumento
al científico Alexander von Humboldt.
El
día 28 de junio retomaron el camino hacia el sur, pasaron por Guamote y llegaron
a Alausí desde donde se dirigieron a visitar la cercana mina de azufre, con el
cual se fabricaba pólvora para la Real Audiencia de Quito. En los siguientes
días avanzaron por Guasuntos y el Nudo del Azuay; al visitar las ruinas de
Ingapirca se sorprendieron la mirar sus muros y piedras talladas, así como su
adoratorio. Siguieron por Burgai y llegaron a Cuenca el 4 de julio. Las
autoridades les brindaron una cálida bienvenida a los viajeros. En su homenaje se
realizaron corridas de toros durante cinco días.
El
17 de julio salieron de Cuenca y continuaron su viaje hacia Loja, ciudad a la
que llegaron el 23 de julio. Humboldt concentró su atención en la famosa
cascarilla o quina que desde la década de 1630 adquirió extraordinaria fama mundial
por su poder para curar las fiebres. Con el mayor rigor científico Humboldt analizó
las diversas especies de quina, sus cualidades y características.
El
28 de julio dejaron Loja y siguieron su camino rumbo al sur, cruzaron el río
Macará y el 2 de agosto durmieron en Ayabaca en el Perú, país en el que también
desplegaron una intensa actividad, primero en por las tierras amazónicas y
luego se dirigieron a Lima. En el Perú permanecieron cinco meses, hasta que en
el Callao emprendieron su viaje por el Pacífico rumbo Guayaquil, puerto al que
arribaron el 2 de enero de 1803.
Durante
su estadía en Lima y en el viaje hacia Guayaquil, Humboldt realizó minuciosas
investigaciones de la temperatura de la corriente marina, la velocidad a la que
se movían sus aguas, la dirección y velocidad de los vientos, por lo que,
debido a sus meticulosas observaciones, se la llamó Corriente Fría de Humboldt.
En
Guayaquil los recibieron la noticia de una erupción del volcán Cotopaxi, por lo
que Humboldt y Montúfar decidieron ascender a los Andes para contemplar el
fenómeno. Viajaron por el río Babahoyo aguas arriba y llegaron a Bodegas desde
donde avanzaron hasta la hacienda El Garzal, sin embargo, debido a las
dificultades del estrecho y peligroso sendero hacia la serranía y en razón de
la proximidad llegada del barco que venía desde el Callao y les llevaría hasta
Acapulco, tomaron la decisión de regresar a Guayaquil, donde los tres viajeros
permanecieron hasta mediados de febrero de 1803, con lo que la estadía de
Humboldt y Bonpland en nuestro país alcanzó el tiempo de ocho meses y medio.
Luego
de trascendentales investigaciones en México viajaron a Cuba y finalmente a
Estados Unidos desde donde retornaron a Europa en 1804.
César
Augusto Alarcón Costta
Quito, 14 de septiembre del 2019
Intervención de Carlos Guerrero, Licenciado en restauración de bienes culturales
HUMBOLDT UN PARADIGMA PATRIMONIAL
“El hombre ha de buscar lo grande y lo
bueno”
“La esclavitud es el mayor mal de la
humanidad”
“Es inmoral la existencia de las
colonias en América”
Estas
máximas las manifestó Humboldt, a quien se lo calificó como
“El padre de todas las ciencias” (1997)
“El más grande de los grandes” (1858)
“El último erudito universal” (1969)
“El fundador de las geociencias” (1970)
“El último de los ilustrados y
autodidacta permanente”.
Quien
tuvo una larga vida de investigación, noventa años fecundos de preparación,
ejecución, realización edición de sus apreciaciones, concepciones y viajes, y
otras actividades.
Hay
que mencionar también, que fue un perseguido político en su tiempo; sobre él
pesaba una orden de captura si pisaba territorio portugués (hoy Brasil), pues
se le consideraba un agitador, por haber expresado que era partidario de la
libertad, igualdad, confraternidad y derechos humanos, pues aún ayudó
materialmente en la edificación de la Asamblea Nacional de París; fue también
un crítico duro, violento, drástico a la época del terror de la revolución
francesa.
Humboldt
fue un investigador polifacético de la América en general, en varios países de
la geografía actual; en su época, territorios del virreinato de Lima, Santa Fé,
Nueva España, gobernaciones, reales audiencias y aún de las colonias
independizadas de Inglaterra, Estados Unidos.
Botánico,
mineralogista, geógrafo físico, ecólogo, ascensionista, vulcanólogo, propulsor
de las ideas libertarias, anti esclavista, crítico de las situaciones políticas
y sociales de América, cartógrafo, diplomático, erudito, redactor de sus
investigaciones expresadas en más de 34 volúmenes. Mantuvo estrecha relación
con filósofos, botánicos y otros personajes, futuros próceres de la independencia
de América, revolucionarios franceses y pioneros de la naciente nación
norteamericana.
Múltiples
actividades científico-investigativas realizó Humboldt en lo que actualmente es
la República del Ecuador, conjuntamente con su compañero Amadeus Bonplan;
efectuó:
1)
Actividades
de geografía física humana
2)
Se
lo debe considerar como el pionero de las investigaciones arqueológicas en el
Ecuador y América Latina.
3)
Siempre
estuvo defendiendo la libertad, la igualdad y criticó las condiciones de las
colonias españolas; por lo tanto, se lo puede considerar también como pionero
en la geopolítica americana.
4)
Realizó
actividades botánicas aquí y en los países que recorrió y estuvo en contacto,
pues estuvo al tanto de las investigaciones del doctor José Celestino Mutis,
quién con su equipo, más de 20 gentes, realizó los estudios de la flora
granadina; conoció las actividades de Anastasio Guzmán, quien fue profesor e
influenció a Manuel Mejía Lequerica, convirtiéndose este en botánico e hizo
incluir en el pensum de las universidades la cátedra de Botánica.
5)
Realizó
actividades andinísticas, ascencionismo y estudios vulcanológicos en el
Ecuador.
6)
Tuvo
contacto con los que serían los futuros próceres de la independencia del Reino
de Quito, hoy Ecuador, con el Marqués de Selva Alegre, Carlos Montúfar;
participó en las tertulias prelibertarias en las propiedades del Marqués, en el
valle de los Chillos, por lo tanto se convirtió en un paradigma coadyuvador de
la independencia del Ecuador.
7)
Realizó
actividades científicas en compañía de científicos americanos e intercambió
conocimientos varios, pues fue amigo personal de Antonio José de Caldas y
muchos otros.
En
todo Estado completo, el territorio y la nación forman una coyuntura férrea; la
nación constituida por sus habitantes, tiene ciertos estamentos; así,
1)
El
grado más bajo en valores (axiología) y deontología (deberes y derechos) es el
lumpen, que desgraciadamente existe en toda sociedad.
2)
Una
clase activa media, constituida por la clase media y alta; una vez más me
refiero a valores y derechos quienes, ejerciendo su oficio o profesión, cumplen
con la rutina para que todo funcione.
3)
Pero
hay una clase pequeña, grupo excepcional de aquellos científicos o personajes
que investigan y aportan nuevas tendencias, nuevas concepciones y postulas
nuevas teorías; son aquellos genios que trascienden su generación y aún los
lares de su patria, y aportan así a la humanidad para su avance; uno de estos
seres excepcionales fue Alexander von Humboldt, quien ha trascendido en el
tiempo y en el espacio, por sus obras y por sus concepciones; son seres
extraordinarios del mundo, que deben ser exaltados por los países donde
actuaron.
Estos
personajes y su obra, deberían ser declarados como “Monumentos Patrimoniales
Universales”; es por esto, que creo prudente elevar una solicitud para este
propósito; se deben juntar las fuerzas y criterios de los gobernadores, de las
provincias, los alcaldes, de las ciudades en donde Humboldt desarrolló sus
actividades y se solicite al Ministerio de Cultura y Patrimonio, a través de
los institutos y órganos correspondientes, para que la obra, actuaciones y él
mismo, sean declarados “Monumento o Patrimonio Tangible como intangible del
Ecuador”.
Creo
fundamental que los países o naciones y estados que se han beneficiado de los
estudios de Humboldt, lo mínimo que pueden ser es, gratos y reconocidos de este
benefactor, ya la historia lo ha colocado en el lugar que le corresponde, pero
creo que la declaratoria como patrimonio sería un tributo a sus desvelos, a su
misión de adelantado y al reconocimiento de los mismos.
Intervención
del MSc. Edgar Coral, Abogado
ALEXANDER VON HUMBOLDT
Fecha de nacimiento: 14 de Septiembre
1769
Fecha de muerte: 6 de Mayo 1859
ALEXANDER
VON HUMBOLDT; los estudiosos de su vida y su obra nos dicen que incursionó en
varios campos de la ciencia, en el ámbito de la botánica, zoología, química,
geología, astronomía, antropología, etnología, lingüística, geografía,
historia, sociología y filosofía
política, enfatizan que para Humboldt, “las
cuestiones sociales, económicas y políticas están relacionadas con los
problemas medio ambientales”.
Se
considera que Humboldt logró dominar las ciencias naturales y las humanas, que
contribuye a su desarrollo, particularmente en aquellas que inherentes al
estudio de la naturaleza eran consideradas disciplinas básicamente constituidas,
y de otras, que como las ciencias humanas, tenían un incipiente desarrollo.
Es
tan largo su peregrinar, inventiva y descubrimientos, que devendría en un despropósito pretender resumir y
analizar la dimensión de su obra en tan corto espacio, por lo que asumo unas
cuantas de sus citas.
En
los registros de su diario, Humboldt revela sus expectativas, “voy a recoger plantas y fósiles, y realizar
observaciones astronómicas con el mejor de los instrumentos. Sin embargo, este
no es el propósito principal de mi viaje. Trataré de averiguar cómo las fuerzas
de la naturaleza actúan unas sobre otras, y de qué manera el entorno geográfico
ejerce su influencia sobre los animales y las plantas. En resumen, debo
aprender acerca de la armonía en la naturaleza.“ sostenía Alexander Humboldt,
y es que, esta observación muestra su firme convicción de buscar un orden entre
hechos que solo resultan aislados desde una perspectiva superficial.
Y
cuando transita por la senda de la investigación de los hechos naturales logra
identificar las graves limitaciones sociales en que viven los pueblos y
naciones a su paso, así narraba en su
diario la precaria situación en la que vivían los pueblos nativos en las calles
y barriadas de la ciudad de México, “son
al menos 30.000 o 40.000 personas indígenas que duermen, a veces incluso sin
ningún tipo de ropaje, en la calle, tan solo con una cobija, un aspecto triste
y espantoso al mismo tiempo: ¡la desigualdad de la riqueza!" exclama. Manifestó que, “aunque la esclavitud desapareció, la desigualdad aún persiste”, resaltando
una estado ofensivo para la conciencia humana que no ha sido superada y bien se
podría afirmar que universalmente se ha agravado.
A
su paso por la Habana, Humboldt se abandera del pensamiento abolicionista y
registra en sus apuntes, de la rebeldía
que anidaba en los pechos de la gran masa esclava, en espera de la libertad
añorada, que finalmente logran alcanzar, rompiendo el yugo colonial que les
ataba a la antigua España.
Tales
experiencias lo convirtieron en opuesto partidario de la esclavitud, y asume
que la ciencia debe estar al servicio de
la libertad, y al afirmar “la unidad de
la especie humana” confronta la discriminación al manifestar su oposición
“a aceptar el antipático supuesto de razas humanas superiores e inferiores”,
“No hay razas inferiores” enfatiza, “todas
ellas están destinadas a alcanzar la libertad“, asumiendo hace una centuria,
el actual principio cosmopolita instituido en la declaración universal de los
derechos humanos (promulgada en el año 1960), que proclama “todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos
y, dotados como están de razón y conciencia…” los conmina a “comportarse fraternalmente los unos con los
otros”.
Una
visión moral se expresa en su discurso social e identifica al hombre como
depredador de su propio hábitat, sostiene que, “en las montañas está la libertad. Las fuentes de la degradación no llegan
a las regiones puras del aire. El mundo está bien en aquellos lugares donde el
ser humano no alcanza a turbarlo con sus miserias.“ lo que lo acerca a una concepción moral,
superable acaso, cuando manifiesta que “el verdadero disfrute viene de la actividad
de la mente y el ejercicio del cuerpo; los dos, expresa, están siempre unidos.”, lo que podría
asumirse como una comprensión interactiva entre el conocimiento y la
realización, siendo que la calificación moral de una conducta no dispone
siempre de un medio para el consenso, de modo que tanto en el pasado como en
tiempos actuales la ciencia no puede estar fundada en la moral, más aun cuando
la ciencia es un instrumento hecho por el hombre para el propio hombre, de modo
que las imperfecciones son inevitables.
La
objetivación de los fenómenos sociales de alguna manera compromete su
conciencia y trasciende al enfoque político de la realidad social, como luego
sostuvo Charles Darwin, al manifestar “cuan
extraño es que nadie comprenda que toda
observación debe estar en favor o en contra de cierta concepción para brindar
alguna utilidad”.
Alexander
Von Humboldt, reflexiona: “¿Qué se pide a
una nación, a una época, a la Humanidad… cuando se le debe mostrar respeto y
admiración?. Se le exige que la educación, la sabiduría y la virtud que estén
bajo su gobierno estén tan extendidas y sean tan fuertes como sea posible, que
aumenten de tal forma sus valores internos que el concepto de humanidad alcance
un contenido elevado y respetado.”, lo que nos da la medida de la
trascendencia vital que le da al conocimiento, la educación y
los valores éticos, considerados como pilares esenciales para la presencia del
hombre en armónica convivencia, añadiendo posteriormente que “El mejor gobierno es el que se hace
innecesario”.
Y
busca dimensionar la libertad y sus fines al manifestar que, “la libertad puede conducir a muchas
transgresiones, pero incluso a los vicios les presta una forma menos innoble.”
A primera vista esta expresión puede parecer una afirmación antojadiza, pero en
su esencia deriva a una aceptación de las limitaciones de todos para la
convivencia racional entre todos, aceptación que con el andar de los tiempos
trasciende más allá de los interrogantes
éticos y el discurso moral, al reconocimiento de derechos tales como, la
igualdad y la no discriminación; la libertad educativa, religiosa, sexual,
poniendo la libertad de cada uno como limite al derecho de los demás.
Y
es que, el aporte de Humboldt, en ese largo peregrinar en busca de conocimiento,
permite establecer que varios de los principios y conceptos tanto naturales
como sociales se van constituyendo en categorías jurídicas vinculadas a los derechos
humanos, que nos obliga a sustentar que tales derechos, su nacimiento y posterior
desarrollo están vinculados a la
presencia del propio hombre sobre la faz de la tierra.
Los derechos humanos, en su evolución, están
íntimamente vinculados a la defensa de la naturaleza, del ecosistema, al medio
ambiente, a la “Pacha mama” o madre tierra, pues la protección y mejoramiento
de medio humano tiene íntima correspondencia con la presencia del hombre sobre
nuestro planeta, de donde se afirma, que el respeto a la vida es el respeto
vital a la existencia misma.
De
ahí que, si bien la vida humana es el supremo bien jurídico de la sociedad y su
existencia es el principal presupuesto para la existencia de los demás bienes
jurídicos que la sociedad le reconoce y garantiza; la naturaleza redime su
importancia vital cuando logra su reconocimiento y protección al ser
considerada sujeto de derechos y garantías conforme lo reconoce la normativa
constitucional ecuatoriana.
Bien cabe resaltar entonces, parafraseando
a Julio Prado Vallejo, que los Derechos Humanos y de la naturaleza, no son
producto de una ley ni originarios de un sistema jurídico ni otorgados por un
gobierno. Tales derechos valen por sí mismos y nacen de la naturaleza del
hombre y de la vida misma. Lo que hace un sistema jurídico es reconocerlos,
garantizarlos, promoverlos.
MSc. Edgar Coral Almeida
ABOGADO
Mat. 7481 C.A.P.
Intervención del Ing. Tannhauser Arévalo Gordón
APRECIACIÓN VULCANOLÓGICA Y SISMOLÓGICA DE ALEXANDER
VON HUMBOLDT EN SUS VIAJES
Humboldt fue el gran explorador de
la realidad de la naturaleza; su espíritu inquieto le lleva a admirar la
grandiosidad de los montes y volcanes, es así como aprecia y mide las distintas
altitudes y su influencia en las especies vivientes, lo que le lleva a
reflexionar que la influencia del medio ambiente y sus distintas zonas en la
vida, son concordantes.
La majestuosidad del volcán Chimborazo
lo había impresionado, por lo que era su obsesión ascender; en el camino, pudo
observar una densa vegetación, que variaba según la altitud. A medida que
ascendía, aparecían grandes praderas, para luego surgir en el horizonte el
Chimborazo, sobre una meseta con un manto de nieve en las laderas. Al llegar a
los 4.700 metros, Humboldt, como siempre, coloca sus instrumentos de medición y
recoge muestras de aire para analizar sus componentes químicos; mide la humedad
y comprueba el punto de ebullición del agua para relacionarlo con datos a
diferentes alturas. Al continuar en su ascensión llega a los 5.917 metros;
nadie había subido nunca tanto.
Al mirar hacia abajo por las laderas del Chimborazo y hacia las
cordilleras a lo lejos, todo lo que Humboldt había visto en años anteriores,
encajó. Recordó todas las plantas, formaciones rocosas y mediciones que había
visto y hecho en los Alpes, los Pirineos y Tenerife; todo lo que había
observado en su vida, encontró su lugar en el rompecabezas; entonces comprendió
que la naturaleza era un entramado de vida y una fuerza global; fue el primero
que entendió que todo estaba entrelazado. Esta nueva noción de naturaleza,
transformó la forma de entender el mundo. A Humboldt le impresionó la semejanza
en climas totalmente alejados unos de otros. En los Andes, encontró un musgo
que le recordaba a una especie de los bosques del norte de Alemania, a miles de
kilómetros de distancia. En las montañas próximas a Caracas, había examinado
unas plantas parecidas a rododendros a las que les llamó rosales alpinos,
porque eran similares a las de los Alpes suizos. Así mismo, en Méjico,
encontraría pinos, cipreses y robles que eran similares a los que crecían en
Canadá. Las plantas alpinas existían en las montañas de Suiza, en Laponia y en
los Andes; todo estaba relacionado.
…era una sucesión de capas en las que se asentaban el mundo vegetal; los
grupos de plantas iban desde especies tropicales en los valles hasta los
líquenes que había visto cerca de la nieve. En el Chimborazo, de un solo
vistazo, contempló toda la naturaleza desplegada frente a él. Andrea Wulf, “La
invención de la naturaleza”
Se maravilló con los volcanes tanto, que dio el nombre de “Avenida de
los Volcanes” a todo el valle interandino que alberga a más de 70 volcanes y
montañas, 27 de ellas aún activas. Todos los volcanes forman parte de la
cordillera de Los Andes.
Ascendió a varios volcanes entre ellos el Pichincha, al que logró llegar
hasta el cráter en su segundo intento; al Chimborazo, el volcán considerado
para la época como el más alto del planeta, lo cual se ratifica en la
actualidad si consideramos su altura desde el centro de la tierra por estar en
la zona ecuatorial, en tanto que el Everest tiene menor altura por estar en la
zona templada del norte, en cuya ascensión alcanzó los 5.917
m de altura, faltándole solamente 393 metros de la cima.
Ascendió al Cayambe y determinó su altura. Al
ver al Cotopaxi por primera vez, sentenció que “es un cono perfecto, el más
bello de todos los nevados».
Cuando estuvo en el Tambo, presenció y soportó un terremoto
Entre los aportes para la ciencia está la medición sistemática de
la velocidad y temperatura de la corriente oceánica fría, que baña costas de
Chile, Perú y alcanza las costas del sur del Ecuador en su desplazamiento hacia
las islas Galápagos. Es la corriente fría de las costas de Sudamérica que
mantiene vigente su nombre tras su muerte.
Ya en el Viejo Continente (1804), tras
haber conseguido importantes datos científicos, geográficos, etnográficos y
estadísticos emprendió la gran tarea de poner sobre el papel sus
descubrimientos y conclusiones. Hay que destacar que el viaje a la América fue
trascendente para Humboldt y sus teorías.
La obra máxima de Humboldt fue
Cosmos, Ensayo de una Descripción Física del Mundo, publicada en 1876. La obra
sería impensable sin su viaje por América. En uno de los tomos describe: “La
región montañosa cercana al Ecuador… es la zona más pequeña de la superficie de
nuestro planeta en la que se observa mayor diversidad de la naturaleza. En la
arrugada cadena de los Andes de la zona de Nueva Granada y la Real Audiencia de
Quito, el hombre puede contemplar al mismo tiempo todas las formas de las plantas”.
Simón Bolívar, a quien conoció y
fueron amigos y, compartieron criterios superiores sobre la liberad y el
desarrollo humano, llegó a concebirle como ‘el Segundo Descubridor de
América’.
Homenaje a Humboldt realizado por la Sociedad Ecuatoriana de Escritores en
las Jornadas Culturales en Quito-Ecuador por los 250 años del natalicio de
Alexander von Humboldt.
Presidente (e) de la Sociedad de Escritores del Ecuador.
Poema de altura
El monte
como un zorro de hambre
se desnuba pardo y franco
deshabita sus aristas de furia
y cual cresta brava,
pulpa enhiesta
bravío y náufrago de espuma
deja ver
Chasqui en frío, páramo lejano
Su secreto de bravura.
La cúpula aguda se sumerge en la nube blanda…
Y se
perdura el mensajero de correo
de pie
en pie de chasqui
y mano a
mano
La orden
de voz en voz como una antorcha.
Mientras el pajonal se deleita en el viento
abriendo su haz de ancha paja
meciendo su copa verde hacia la ebriedad de la
tarde.
El monte
viaja
entre la
niebla amante.
Incauto y solo,
Hecho Submarino de la altura.
Senda adentro estás, piedra perenne y solitaria
Chilintosa, roca inmensa que el volcán donara
naciendo desde el centro a un arco iris de fuego.
Vas hundiendo en el páramo tu rostro de
animal
vencido.
Y en el sello de la patria
el cóndor se escuda al monte
de
enorme pájaro del ande
desdibujada la cicatriz del agua
nevado entero y perfecto.
Hechura
de nieve, Cotopaxi
bocio
del mundo hacia la luna.
Manuel Federico Ponce
Presidente (e) de la Sociedad de Escritores del
Ecuador.
Nemo Domínguez
Vicepresidente del Centro Internacional de Estudios Poéticos.
Alexander
von Humboldt 1802
Desde
su vieja Europa
Emprende
el viaje de sus sueños
Cruzando
los mares
Guiado
por las estrellas del cielo
América
Donde
se abre paso
Por escabrosas trochas
De
las empinadas laderas
De
la Cordillera de los Andes
No
tras el dorado
No
tras las tierras
Para
esclavizar
Y
explotar al indio
Si
no tras el conocimiento
Y
descubrir
El
misterio que guarda
La
belleza
De
nuestra geografía
Con
su flora y fauna
En
las entrañas
De
nuestras enmarañadas cebas
De
nuestras ruidosas montañas
Que
en las noches
Y
en los días
Se
convierten
En
el concierto de música
Música
celestial
El
viento
El
trinar de las aves
El
ladrido
Y
aullido de los animales
Junto
al chasquido
De
las aguas Cristalinas
Puras
Que
corren
Las
montañas
Laderas
Valles
Regando
Con
su fresca briza
Los
jardines
Las
flores
De
nuestra América
Que
nos regalan
En
cada amanecer del nuevo día
Un
suave
Y
delicado aroma
Que
cautivo
El
corazón
El
alma
A
nuestros visitantes
Que
perdurara
Eternamente
En
su memoria
La
belleza
Esa
belleza
Única
Que
tiene
Esta
nuestra América
Que
inspira
A
crear
Y
debelar
Los
grandes misterios
Que
guarda
Nuestra
naturaleza
Para
bien del conocimiento
Y
sabiduría
De
la humanidad
De
nuestro amado planeta.
Nemo
Domínguez.
